El interiorismo escandinavo no pasa de moda, ¿por qué será? Entender las claves que lo componen es la forma de descubrir la razón por la que este estilo continúa utilizándose aunque pasen los años.
Nuestro equipo ha diseñado muchos proyectos de decoración en Las Rozas, Majadahonda, Pozuelo… y en muchos de ellos nos hemos basado en este eficaz y duradero estilo decorativo.
Cómo lograr el estilo de interiorismo escandinavo
Las recomendaciones para lograrlo son las mismas que los principios en los que se basa. La atemporalidad de este estilo nórdico se consigue gracias al predominio del blanco, a la utilización de muebles simples pero funcionales y a su luminosidad.
Si pensamos en el origen de estos estilos, cobra bastante sentido que busquen crear espacios amplios, acogedores y muy luminosos. Puesto que provienen de países en los que las horas de luz son escasas, especialmente en algunas épocas del año, y durante el frío invierno se pasa mucho tiempo dentro de la vivienda, es necesario contar con estancias amables respecto al clima.
Podríamos resumirlo en que se aúnan la comodidad y el minimalismo del diseño escandinavo, el cual tuvo su auge a principios del siglo XX, por eso en el estilo nórdico vemos muchas reminiscencias del modernismo como:
- Las líneas limpias
- El uso mínimo de ornamentos decorativos
- La inclusión de obras de arte y diseño
¿Qué pasa con el blanco?
No debemos confundir el interiorismo escandinavo con los espacios totalmente blancos e impolutos que recuerdan más a un laboratorio que a una casa (en este artículo te enseñamos a hacer acogedor un espacio minimalista e industrial).
El blanco del estilo nórdico está en las paredes, en los techos, incluso en los suelos, pero se llena de color gracias a los muebles, los elementos decorativos y las plantas.
Rodearse de materiales naturales es otra de las máximas de este estilo, por lo que es muy común agregar mobiliario de madera e incluso complementos decorativos de este mismo material. El cáñamo, el yute y las diferentes telas nos ayudan a conseguir una atmósfera acogedora.
Funcionalidad en todo momento
Los muebles escandinavos no se complican: sencillos, de líneas rectas y orgánicas, curvas suaves y un alto grado de funcionalidad.
Colores claros, materiales nobles y naturales, e interiores muy cómodos, siempre pensando en la optimización del almacenamiento.
El diseño nórdico es minimalista y tremendamente práctico. El interiorismo escandinavo lo es también.
Luz, luz y más luz
En el estilo nórdico no se busca la luz artificial que proporcionan lámparas y apliques, se busca la luz natural.
En la mayoría de viviendas de estos países, ni siquiera se utilizan cortinas: se quiere toda la luz que sea posible. Así que olvídate de telas tupidas en las cortinas, si tu intimidad te preocupa, recurre a tejidos naturales y frescos. La luminosidad en el salón no es negociable.
El interiorismo escandinavo busca la comodidad, la funcionalidad, busca que el tiempo que pases en casa sea agradable, que esté todo a mano, que puedas disfrutar de tu hogar tantas horas como desees. O, en el caso de estos países nórdicos, tanto tiempo como el clima te obligue.
Si te gusta este estilo y quieres implementarlo en tu vivienda, no dudes en ponerte en contacto conmigo. Juntos crearemos la casa que siempre has soñado.
