Tener un vestidor es un sueño, además de una forma ideal de organización. Si tienes un vestidor estrecho, no pasa nada, hoy te contamos cómo aprovecharlo.

En muchos de nuestros proyectos de decoración en Las Rozas, Majadahonda y alrededores, nos hemos encontrado con espacios pequeños o complicados. Lejos de ser un problema, este tipo de vestidores suponen un reto de interiorismo que nos encanta.

Tengo un vestido estrecho, ¿qué puedo hacer?

Despreocuparte de todo y dejárnoslo a nosotros.

Salvo que la casa sea de reciente construcción, lo más habitual es que la vivienda no cuente con un espacio pensado para albergar un vestidor. Por suerte, existen soluciones de interiorismo para casi todo.

Cuando ocupamos una habitación que en origen no se diseñó como vestidor, lo más probable es que queden huecos donde coinciden dos módulos. Esto significa que perdemos espacio de almacenaje, pero existen opciones con las que solucionarlo.

Así es como resolvemos un problema de espacio

Recuerda que, además de con estos trucos que te vamos a dar, también se puede cambiar la percepción visual del espacio mediante los colores y los materiales.

¿Listo para solucionar el problema de un vestidor estrecho?

• Vestidor en U: este es el tipo de espacios donde lo más común es que coincidan módulos y desaproveches huecos. Podemos solucionarlo mediante módulos que se prolongan en el interior de la esquina. En ellos podemos colocar barras para colgar las prendas que utilizamos menos o que corresponden a otra temporada.
• Otra opción para los vestidores en forma de U es que el módulo central tenga menos fondo. De esta forma, los centímetros que perderemos en las esquinas que coincidan con el resto de módulos, serán los menos posibles. Esta parte central puede utilizarse para objetos con poco fondo como bolsos o accesorios.
• Las barras son la solución que mejor compensa las esquinas o los huecos muertos en los vestidores estrechos. En la parte menos accesible colocaremos aquellas prendas más voluminosas, o las que utilizamos solo de vez en cuando.
• Incorporar un estante en U o en L como maletero también es una muy buena alternativa. De esta forma aprovecharemos el espacio al máximo y mantendremos organizado el equipaje que no siempre usamos.
• Un vestidor abierto es ideal para evitar las esquinas. Estanterías y barras al aire que recorren las paredes de principio a fin, sin límites. El único inconveniente es que, si no está muy ordenado, la carga visual será mayor. Sin embargo, la comodidad de un vestidor sin puertas es inmensa.
• En caso de que el vestidor tenga forma de L, podemos utilizar solo la pared más larga. En la parte final, la que forma la L, instalaremos un módulo de cajones y baldas que sobresalen. De esta manera aprovecharemos ambas paredes sin perder ni un centímetro.
• Si esta opción no te convence, puedes colocar dos barras en la L. Una de ellas quedará frontal y la otra lateral, permitiéndonos colgar la ropa sin que se amontone. Incluso puedes colocarlas a diferentes alturas.
• Si el espacio es muy estrecho y existe la posibilidad, ¿qué te parece abrirlo al baño? Sé que es original y diferente, pero sigue siendo muy funcional. Con la ayuda de nuestro equipo de interiorismo, podrás tener un vestidor incluso aunque tu vivienda sea pequeña. Esta idea no es nada descabellada y te prometemos que te va a encantar.

¿Qué te han parecido estas soluciones para un vestidor estrecho? Sea cual sea el espacio del que dispongas, en el estudio Laura Cortázar te ayudaremos a sacarle el máximo partido. ¿Empezamos?